Al menos unas 62 personas murieron el martes en violentos enfrentamientos de bandas delincuenciales registrados de manera simultánea en el interior de tres cárceles de Ecuador a causa de una disputa por tomar el liderazgo dentro de los centros penitenciarios.
El presidente Lenín Moreno ha buscado controlar la situación de violencia en las cárceles del país andino, declarando al sistema penitenciario en estado de emergencia de manera temporal, debido a que frecuentemente se registran enfrentamientos entre grupos.
El director del Servicio de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de Libertad, Edmundo Moncayo, dijo a la prensa que hubo unos 62 presos fallecidos tras los enfrentamientos en las tres cárceles. El funcionario explicó que los hechos fueron por dos grupos que buscaban un liderazgo delictivo al interior de los centros de privación de libertad.
Los actos violentos se registraron en cárceles ubicadas en las provincias de Guayas, Azuay y Cotopaxi, que concentran cerca del 70% de la población carcelaria del país, según datos oficiales.
Unos 800 policías se han movilizado para retomar el control de los centros penitenciarios, mientras que el Gobierno informó que había efectivos heridos, sin dar mayores detalles.
Moreno afirmó en su cuenta de Twitter que dispuso a las Fuerzas Armadas un "estricto control" de armas, municiones y explosivos en los perímetros exteriores de los centros penitenciarios.
En Ecuador existen unas 53 cárceles, incluidos los centros para menores infractores, con una población carcelaria de más 37.500 personas, según datos oficiales. (Reuters)